Tentaciones, hemos construido nuestra sociedad en base a ellas.
Nos bombardean continuamente con productos " imprescindibles" para nuestro bienestar.
Desde la casa, el coche, los lujos... hasta poseer el hombre o la mujer que se considera valida nuestro estatus.
Crean frustraciones a quienes no pueden acceder a ellas.
Crean diferencias entre quienes pueden y quienes no pueden adquirirlas... llegando a enfrentarse.
Crean campañas negacionistas ante quienes osan discrepar de su relevancia y muestran el coste real de estos productos en el medio ambiente y en si mismos.
Los valores de esta sociedad son " tanto tienes ( material) tanto vales"
Si, vivimos en una sociedad que se basa en el mercado. Yo produzco y a la vez compro.
Y para mantener mi nivel de poder comprar he de vender lo que produzco... muchas veces con campañas agresivas sin ningún tipo de ética... o fracaso y me frustró y no me respeto y fruto de ello entro en depresión o en ira ciega.
Quienes no producen se dedican a administrar, de entrada menos estrés... pero si lo reciben de quienes les impelen a comprar.
Hemos marcado como mercancía no solo productos que fabricamos o cultivamos, también hemos incluido nuestro propio cuerpo ( vendiéndolo al mejor postor por puro placer ajeno o explotación extenuante)... y también la mente, pues de la capacidad de atraer clientes a toda costa, viven muchos.
Afortunadamente el alma, aunque algunos crean que si es una mercancía, no lo es.
Ella, nuestra verdadera esencia, es la que nos protege de las tentaciones.
Ella, cuando esta despierta... tiene tendencia a dormirse si no se la deja manifestarse, cuando se la relega en pos de obtener las tentaciones.
Las tentaciones son: adicciones, drogas, somníferos o como quieras llamarles... nos advierte del peligro.
Nuestra mente no es sabia, nuestra mente está diseñada para controlar nuestras funciones corporales y procurarnos bienestar interno y externo.
Cuando algo lo asocia a bueno, pone toda su maquinaria a trabajar para conseguirlo... y lo mismo ocurre cuando lo asocia a malo, su afán es protegernos.
De entrada es muy útil, imprescindible para nuestra sobrevivencia.
El problema reside en lo que considera bueno o malo.
Si es bueno solo desde la perspectiva de cuerpo y mente, tiende a adormecer al alma joven, que se distrae con sensaciones que no controla...Y desaparece con ello su sabiduría.
Se convierte en mente depredadora, carente de sentimientos... lo suyo es puro instinto.
Un conductor dentro de un vehículo que se duerme, porque a dejado al mando al ordenador programado para hacerlo , sin ningun control y que esta en fase de practicas. ¿Que puede salir mal?
El cuerpo necesita alimentarse y descansar... al igual que la mente. No están programados para funcionar continuamente ni para lograrlo sin alimentarse. El alma no lo necesita, pero puede adormecerse con somníferos varios cuando desconoce sus efectos.
Cuando hay mala calidad de alimentación o descanso... la maquinaria se descontrola. Busca suplir las deficiencias.
Y aquí es donde el conductor ha de marca las pautas.
Somos almas en practicas dentro de vehículos... cuya finalidad última no es procurarnos sustento y movernos, la finalidad es aprender a procurarnos sustento y movernos sin dañar el entorno y valorarlo.
Cuanto más noveles más nos despistamos, adormecemos y tomamos decisiones erróneas... que se traducen en choques... que nos despiertan.
¡así aprendemos!
Aprender lleva integrado ir tomando conciencia de las consecuencias de las acciones tomadas en el aprendizaje.
Tenemos un medidor de percia... es nuestro bienestar interno.
No hay trampa posible.
Es una gran satisfacción conducir dominando el vehículo.
Es como en los videojuegos cuando alcanzamos la suficiente pericia para pasar de pantalla.
Mientras no lo logramos, aquello es un puro desastre.
Las tentaciones son distracciones, puestas expresamente para que el conductor aprenda a no reaccionar instintivamente a ellas.
En este videojuego, que es la vida, tenemos a nuestra disposición todas las herramientas necesarias para completarlo.
Se nos van dando a medida que vamos alcanzando más pericia... es necesario instruir sobre el potencial de una cerilla a quien no lo conoce.
Tenemos toda una serie de retos, necesarios para aprender a usar la cerilla.
Mientras no aprendemos, nos quemamos y acabamos achicharrados... virtualmente.
Nos frustramos, pero sabemos que solo es cuestión de volver a comenzar la partida.
Tenemos vidas infinitas... y no podemos abandonar el juego hasta completarlo.
El video juego está lleno de personajes, pero, al final, solo el nuestro importa, el que nosotros como alma le hacemos tomar decisiones.
Rodearnos de personajes que ayuden es una buena herramienta, lo contrario... lo experimentamos como dolor.
Nacemos solos y morimos solos... pero que agradecidos estamos a los que nos acompañan y tratan con ternura y respeto.
Al final hay un solo espíritu que diseña y controla todo.
Yo Soy Todo manifestándome en todo tiempo, lugar y forma de existencia.
Es bueno tomar conciencia de nuestro estado de bienestar interno, nos ayuda a rectificar conductas.
Cursos y terapias de Reiki presenciales y a distancia. Terapias gratuitas a distancia una vez al mes.