lunes, 29 de abril de 2024

 


El cuerpo, la mente y el espíritu

Nuestro cuerpo y mente son nuestros aliados... a pesar de nosotros mismos.
El espíritu, cuando encarna en un organismo formado por cuerpo y mente, lo hace bastante aturdido. necesita un tiempo para aprender su funcionamiento. Él es pura energía... y se encuentra dentro de algo que le permite, cuando aprende a usarlo, una gran cantidad de actividades, sensaciones y emociones. Y de entrada queda abducido por todo ellas. Si le sumamos que, aunque no conscientemente, trae consigo el bagaje de vidas pasadas... con todo lo que ello conlleva, durante mucho tiempo actua más en automático... reaccionando instintivamente a patrones que no tiene ni idea de donde han salido.
El entorno, primero el familiar y después se va expandiendo marca. La forma de ver la vida de la comunidad es una programación muy fuerte. Con el tiempo su mente puede tomar conclusiones... que pueden ser contrarias a dicha programación. Aquí hay dos caminos, ser consecuente o frustrarse. Es duro ir contra corriente.
En todo este tiempo de aprendizaje usamos nuestro cuerpo y mente, sin reparar mucho en si lo usamos, explotamos o sobre explotamos. Cuando acabamos comprendiendo que son herramientas a nuestro servicio, que poseyendo la capacidad de auto regenerarse muy potente, las hemos llevado muchas veces al limite, hay daños que puede que sean reparables pero otros no.
Cuando logramos comprender esto... hemos avanzado mucho. Si, somos conscientes de como hemos tratado a nuestro cuerpo... comprendemos que no somos nosotros... es una herramienta y muy sofisticada. También comprendemos que hemos actuado igual con nuestra mente... otra herramienta muy sofisticada. Entonces no nos queda más que admitir que, si hemos tratado mal a nuestro cuerpo y mente... nosotros somos algo más que ellos. Estamos evaluándolos. Podemos, en este momento, ordenar a la mente que cambie sus pautas y modifique el comportamiento físico y mental.
Si, llámate como quieras, incluso puedes auto engañarte... pero la realidad es que identificarte con tu cuerpo y mente es un auto engaño, que si lo utilizas, es porque aún no estas preparado para superar los condicionantes que trajiste y te inculcaron.
He comenzado este escrito diciéndote que nuestro cuerpo y mente son nuestros aliados. Si, estan bajo nuestras ordenes... novatos aprendiendo a conducir. Pero no se callan. protestan cuando abusamos de sus funciones... solo que no les escuchamos. Y ellos continúan quejándose... incluso llegan a gritar desesperadamente.
Hazte un auto chequeo. Con el paso de los años es muy probable que sufras algunas disfunciones... en la digestión, el aparato respiratorio, en tu piel, en tu estado anímico... por ejemplo. Y ahora revisa como has tratado estas funciones en el pasado.
Ahora solo estas recogiendo los frutos de tu uso de ellos... y eso que se han auto regenerado todo lo que han podido.
Ahora solo queda tomar conciencia y reparar lo que se pueda. No te amargues con lo que ya no tiene remedio... más útil te será adaptarte. Es "el precio" de tu aprendizaje.
Una vez tomada conciencia, te queda continuar este camino de auto destrucción, esta vez siendo consciente de ello, y con tu mente y cuerpo gritando, cosa que te provoca dolor... o hacer cambios.
Mientras somos inconscientes somos ignorantes. Cuando tomamos conciencia comprendemos.
Si lo que te produce bienestar, te lo produce solo a corto plazo. Si para mantener tu bienestar has de estar alimentándolo continuamente, o si te paras... no lo soportas, tu cuerpo y mente te estan diciendo que no vas bien.
Busca la paz interior, busca el bienestar interior, búscate a ti mismo... no fuera, sino en tu interior. Estas, te lo aseguro.
Abrázate, amate, cuídate... si te amas va todo en el mismo paquete.
No hay errores, hay experiencias que te van enseñando... a tu ritmo, a tomar conciencia de quien en realidad eres. Mientras no lo asimilas... tu cuerpo y mente se continuaran quejando, estan programados para ayudarte a lograrlo.
Eres... desde siempre y por siempre. Y ahora Estas aquí.
Tu cuerpo y mente se disolverán un dia, tú no. Eres energía... consciente, ilimitada en todo y maravillosa, que estas viviendo una experiencia. No se el porque... solo constato los hechos que me han llevado ha traves de mi (mi conciencia)ha estas conclusiones.
Mi es posesivo... pertenece a alguien. Todos los mis tienen dueño. Soy no.
No puedo declarar yo mi... puedo declarar yo soy... y ahora me reconozco.

martes, 23 de abril de 2024


 

Las palabras son expresiones de emociones y sentimientos.

Los pensamientos también.
Las podemos emitir de manera más o menos consciente.
Pueden dañar, sanar, acariciar, aburrir...
Vayamos al inicio... la palabra y el pensamiento son manifestaciones.
La palabra se materializa al emitir nosotros una vibración, emitida en una determinada frecuencia, dada por la emoción o sentimiento que la ha provocado.
El pensamiento también emite su vibración.
Aquí no valen trampas... cualquier palabra o pensamiento emitido, amor por ejemplo, vibra a una determinada frecuencia según la intención inicial... expresar un sentimiento noble, mentir, alabar, banalizar... etc.
Más allá de si el receptor es capaz de distinguir la intención y con ello reaccionar... a quien más afecta es a quien la emite.
Me explico.
Somos en última instancia energia vibrando a diferentes frecuencias, determinadas por como nos sentimos... e influenciadas por frecuencias externas que nos afectan.
Nuestras palabras o pensamientos, emiten una determinada frecuencia... fiel reflejo de nuestra vibración general en este momento... con lo que lo que logramos es potenciar esta vibración... la retroalimentamos.
Si emitimos palabras o tenemos pensamientos de baja frecuencia de manera frecuente... esta vibración repercute en nuestro estado anímico, del estado anímico a materializar dicha vibración solo hay un paso... y es inevitable.
Soy un perdedor, no me importa la gente, soy una desgracia, todo me sale mal, soy feo, nadie me quiere, te odio, etc... o emitimos palabras amables con falsa intención, nuestra vida será un desastre.
Quizá tengamos periodos de calma e incluso bonanza... pero nuestro estado anímico, ese que intentamos que no se descubra porqué nos hace muy vulnerables, será un desastre.
Un ejemplo claro de como nos afectan las vibraciones son las canciones y la música que las acompaña. Según su mensaje pueden alegrarnos, calmarnos, irritarnos, deprimirnos... y cambiar nuestro humor por periodos más o menos largos de tiempo.
Tomar conciencia de lo que emitimos... recuerda que no valen trampas... nos permitirá cambiar nuestra vibración.
Cuanto más alta es la vibración... más claridad mental, serenidad, empatia, generosidad y bienestar sentimos... y como consecuencia emitimos.
Cuando dos o más personas interactúan, es la suma de todas las vibraciones la que afecta al conjunto.
Se necesita mucha fuerza mental para mantener la propia.
Todos detectamos los ambientes cargados o agradables instintivamente... aunque no siempre tenemos la capacidad de alejarnos de los cargados.
Te voy a contar un simple truco para lograrlo.
Ante una situación, donde notas un cierto ambiente hostil, solo tienes que cerrar los puños manteniendo el dedo pulgar dentro.
Es algo que no llama la atención... y que cierra tu circuito vital, protegiéndote de injerencias no deseadas externas. Notarás como aumenta tu fuerza mental al poco tiempo.
Presta atención a lo que emites y protégete de emisiones externas toxicas.

martes, 16 de abril de 2024



La parusía

El tiempo pasado no volverá.
El presente no se quedará.
El futuro es incierto... no por ello terrible.
Vivimos inmersos en ciclos mucho más amplios que los días y las noches o las estaciones.
Por poner el ejemplo más básico, el día, las horas pasadas no volverán, el presente no permanece, el futuro es la consecuencia...
Noche y día no son regalos y castigos divinos.
Distintas religiones y culturas nos hablan del final de esta civilización... digamos que llega la noche... y a está le seguirá un nuevo y esplendoroso amanecer.
No sabemos el día ni la hora, se nos dice. Pero hay que prestar atención a las señales.
Nuestro Ser esta encarnado en un cuerpo, que emite diferentes vibraciones... según su nivel de conciencia.
La Tierra es también un ser vivo, también emite su propia vibración...
Al igual que nosotros pasamos por diferentes etapas desde nuestro nacimiento, la Tierra también.
No podemos concretar el momento exacto en que pasamos de una etapa a la otra... solo constatar lo evidente, cuando ha sucedido.
Una niña deja de serlo en el momento en que su cuerpo menstrua... no sabe el día ni la hora exactos.. pero su cuerpo va emitiendo señales de que el momento se acerca.
La vibración de la Tierra ha de ser armónica con la de sus habitantes. Si la Tierra llega, en su evolución, a una nueva etapa... los habitantes que emitan vibraciones compatibles la acompañarán. Será una nueva etapa. Un nuevo día. Un nuevo ciclo, para todo el conjunto.
Los habitantes que no vibran en armonía, no desaparecerán... la energía ni se crea ni se destruye, solo se transforma. Pero no acompañarán a la Tierra en esta nueva etapa. Su nivel de vibración no es aún lo suficientemente elevado.
Será como un desdoblamiento, continuarán en una Tierra en su versión actual...
Nada es permanente, solo el cambio.
Alcanzaran la nueva vibración más tarde.
Quienes aún gatean, no pueden seguir el ritmo de quienes ya han aprendido a andar... ni disfrutar de las mejoras que conlleva la nueva etapa.
Se nos ha alertado de las señales, de que se acerca el cambio.
El aumento de las manifestaciones vibracionales bajas... guerras, enfermedades, injusticias, egoísmos...
Aparecerán nuevas tribulaciones. Viviremos inmersos en la zozobra de una calamidad tras otra.
Nuestra percepción del tiempo se distorsionará, tendremos la percepción de que se ha acelerado... continuando su paso regularmente.
Ante tanto caos y dolor aparecerá un falso salvador, que nos prometerá paz y bienestar.
Y es entonces, cuando a los tres años y ocho meses de esta proclama... llegará la parusía... el cambio de vibración de la Tierra se hará efectivo.
Todo cambio energético conlleva una manifestación, será un resplandor que recorrerá la tierra de este a oeste.
No se castigará a unos y premiará a otros. Solo acontecerá que cada uno se adecuará al nuevo estado vibratorio.
El apocalipsis nos dice que, cuando llegue la parusía, ya todo estará hecho. Que quien este en casa se quede en ella, que si esta en la calle lo mismo.
Que habrán dos hombres arando un mismo campo y uno dejara de ser visible para el otro.
Solo percibimos unos grados de vibración... sabemos que existen, pero los infrarrojos y los ultravioleta no los vemos.
No se puede aumentar la vibración de manera especulativa... la causa primera sería egoísmo y/o miedo, vibraciones bajas, la treta no daría resultado.
En el final de etapa surgen muchos falsos salvadores. Su misión es dar una nueva oportunidad de decidir, a quienes les oyen... si les creen o se apartan. La duda y su resolución conllevan un cambio de vibración.
Los cambios de vibración se producen por convicción, no por interés.
Venimos a aprender a amar y amarnos... sin prisa, pero sin pausa se nos va enseñando.
Quienes emiten ya una vibración elevada, conviven con quienes vibran más bajo... solo cambia su percepción de la realidad.
Su realidad es más luminosa... son percibidos, de manera inconsciente, como un faro... que guía a quienes desean alcanzarla 🙂

martes, 9 de abril de 2024

 


La gran revolución... propia.

Si, no se trata de cambiar el mundo... se trata de cambiarnos a nosotros mismos.
Cuando un sistema colapsa, por desesperación y hartazgo aparece una revolución. Su finalidad es corregir errores e injusticias y mejorar el mundo. Siempre alguien lidera la revolución... alguien con carisma, que aglutina los miedos y deseos y promete el cambio.
Yo siento que esta civilización a colapsado, sus errores e injusticias van en aumento y deseo fervientemente vivir en un mundo mejor.
No, no voy a seguir a un nuevo líder... ni a presentarme para tal fin.
Valoro ser autosuficiente, pensar por mi misma, ir aprendiendo algo cada día, respetar al prójimo, vivir en un mundo más amable, sincero, ilusionante, respetuoso, justo... y sentirme bien.
Resulta que, todo esto, depende de mi... no del líder de turno. Mi líder soy yo. No me valen ya las excusas.

El paso de los años me resta autosuficiencia... es mi única concesión, he de aceptarla y adecuarme a ella. El vehículo con el que me desplazo es perecedero.
El resto, me digo y siento, depende exclusivamente de mi.
Soy yo quien decide como vivir, como relacionarme y como encarar lo que la vida me pone por delante.
De hecho lo hacemos todos, solo que con diferentes criterios.

Una vez he tomado plena conciencia de mi poder, me he lanzado a usarlo.
Si, estoy en plena revolución consciente e individual... cuyo fin es vivir según mis valores.
No me valen ya las excusas, el buscar apoyos y directrices, ni paralizarme por miedo... todo esta en mis manos, soy la única responsable y receptora de los beneficios.

Respeto que cada cual viva como quiera, mientras su libertad no afecte la ajena.
Valoro las buenas acciones y comportamientos... vengan de donde vengan.
Disfruto de la belleza que me rodea... me empapo en ella. Da igual provenga de la naturaleza, de una obra creada por el hombre... o por la manifestación y grandeza de los sentimientos.
Agradezco el trato amable, el consejo sabio, la buena compañía... y la solidaridad.
Expreso mis sentimientos... al aire o a quien tenga bien escucharlos y si se tercia los comparto.
Y, en consecuencia, mi mundo esta cambiando a pasos agigantados.

El dolor, la injusticia, el egoísmo, la barbarie, la ignorancia, la manipulación, el materialismo, la mentira, las guerras... y todas las desgracias que se te ocurran... por desgracia, siguen existiendo, me siento impotente para erradicarlas.
Mi revolución individual a conseguido que, en este desastre, haya una victima menos... yo.
Que pueda aportar, en la medida de mis posibilidades... granitos de amabilidad, solidaridad, respeto, empatia y compañía.

Y aquí estoy, compartiendo espacio... pero no realidad.

Siendo consciente de los males que afligen el mundo... pero no he sucumbido o participando en su aumento.

Alegrándome y agradeciendo por todo lo bueno que percibo y vivo... que fortalece mi esperanza.

Y deseando que cada vez más y más personas, decidan individualmente dejar de esperar una revolución y un líder que les salve... y comiencen por cambiarse a sí mismas... dejando atrás el sistema ya caduco para construirse uno mejor.

Del pasado aprendemos, el presente lo vivimos y el futuro es un lienzo para materializar nuestros más ansiados anhelos.

Mi revolución... mi responsabilidad, mi derecho, consiste en manifestar, en mi, el cambio que anhelo.

Arriba la autoestima, abajo los temores, manifiesta la mejor versión de ti mismo, deja de compararte, aprende de tu pasado... acéptate y amate.
No es fácil, tendrás retrocesos y dudas... desistir no es una opción, solo se nos permiten breves periodos de descanso... con la insatisfacción como motivación para reemprender el camino.

Los buenos compañeros de viaje, nos lo hacen más llevadero. Se camina mas rápido solo... se llega más lejos acompañado.

En el largo y escarpado camino... crecemos, nos fortalecemos, aprendemos el verdadero valor de todo, dejamos atrás miedos y recordamos que somos seres inmortales... seres pura luz... recorriendo caminos ficticios con los que acumulamos experiencias... usando para ello la tecnologia que nos brinda nuestro cuerpo o vehiculo.

Solo es real lo que sentimos y como reaccionamos a ello... todo lo demás es puro decorado virtual.

La energia se manifiesta en la luz y el calor que desprende la vela.
La energia es la realidad... la vela un soporte para manifestarse.

¡¡¡Buen camino!!!

Te agradeceré comentes mis reflexiones, juntos aprendemos.
Muchas gracias por tu atención.



Todas las reacciones:

Vistas de página en total