El Tantra y sus repercusiones
El Tantra es una practica que a través de la energía sexual que se desprende en el orgasmo, podemos llegar a la iluminación... o a la adicción. Esta energia reposa en todo hombre y mujer en la base de la columna vertebral, se la ha representado siempre como a una serpiente enroscada, recibe el nombre de energía Kundalini.
La energía Kundalini se alimenta de los órganos sexuales y posee una gran fuerza que puede ser empleada tanto para crear como para destruir, al despertar, puede alzarse majestuosa y alcanzar nuestra cúspide y a ese estado le llamamos iluminación o conocimiento... o bien puede caer y entonces nos vemos arrastrados al sueño de la inconsciencia, representando por la cola del diablo o serpiente invertida.
Es por tanto una poderosa herramienta, que por medio de la practica sexual, podemos transitar por el camino hacia la iluminación o hacia la adicción.
Se ha escrito mucho sobre diferentes técnicas para alcanzar el estado de iluminación a través del sexo, no voy a explicarlas pues estoy convencida que no es por la mera técnica que se puede llegar a alcanzarla.
Cuando una persona decide poner en practica una serie de ejercicios físicos y/o mentales para lograr la iluminación esta basándose de entrada en su ego, su interés personal. El camino hacia la iluminación no es físico. El ego, como fin, despierta la conciencia animal y aprisiona el alma.
Para alcanzar la iluminación hemos de elevarnos del plano físico y del plano mental hasta alcanzar el espiritual.
El Tantra puede manifestarse por tanto en el plano físico y se le llama Tantra negro, en el físico y en el mental al que denominamos Tantra gris o en los tres planos (físico, mental y espiritual) llamado Tantra blanco.
Tantra negro: se trata de alcanzar la felicidad a través del placer propio, es un sentimiento plenamente egoísta . Solo buscamos satisfacer nuestros instintos primarios. Como solo alcanzamos un placer físico no logramos la satisfacción plena y quedamos atrapados por el deseo de alcanzarla. Al quedar atrapados por el deseo, se nos nubla la conciencia... la lujuria nos domina.... la oscuridad y el dolor se apoderan de nosotros.
Nunca, por mas que tengamos, quedaremos satisfechos.
Tantra gris:aquí la mente a logrado entender que para alcanzar un grado mas alto de placer, es mejor la satisfacción mutua, hay un cierto grado de interés por el otro, pero como el fin ultimo es el placer propio, acaba degenerando siempre a Tantra negro.
Tantra blanco: este es el único camino al conocimiento. Se alcanza cuando las partes manifiestan su amor hacia el otro, nunca como un medio para alcanzar su placer. Es así... y solo así, cuando se produce la verdadera unión de cuerpos y almas.
Y como una broma cruel de la vida, los que no persiguen el propio placer, son los únicos que si alcanzan la plena satisfacción y el conocimiento. Su meta no es recibir... sino manifestar sus sentimientos más elevados.
Por ello, toda postura, técnica de contención, decorados o sublimación de los sentidos son completamente inútiles.
Es solo el amor... manifestado en generosidad, unión, ilusión, alegría, ternura, respeto y pasión (no deseo, que es posesión)....el que logra el milagro de elevarnos desde el plano físico hasta el espiritual.
Es en este estado, donde dejamos de ver nuestra realidad con los ojos físicos y la comprensión de la mente... y contemplamos una nueva realidad que nos muestran los ojos del alma... y nuestras percepciones y decisiones las tomamos en base a ello.
Es en el dar y recibir recíprocos donde esta el gran secreto. Solo nos llegan al alma las caricias que salen de ella.
No hay comentarios:
Publicar un comentario